Conectando raíces culturales con la música
Conectando raíces culturales con la música
“A través de este programa mi hija y muchos niños se ven beneficiados y pueden mejorar su entorno escolar y sus relaciones interpersonales”, manifestó Nataly Torres.
Ella es una madre de familia que decidió inscribir a su hija Valery Gualteros, en Batuta Ecopetrol, un programa que beneficia a 420 niñas, niños y jóvenes en Casanare, para acceder a un proceso de formación musical.
La iniciativa se desarrolla en alianza con la Fundación Nacional Batuta, tiene lugar en Aguazul, Tauramena y Yopal, y brinda herramientas e incentivos para que los estudiantes aprendan a usar mejor su tiempo libre en medio de la pandemia y la alternancia.
“A mí me encanta mucho la música y quise que me dieran la oportunidad de aprender”, indicó Hellen Adriana Rodríguez, beneficiaria del programa en Yopal.
Por su parte, Valery Gualteros, de 7 años, quien participa de este programa en Tauramena, sostuvo: “lo que más me gusta de Batuta es que me enseñan a tocar instrumentos que yo puedo aprender y porque puedo cantar”.
Si bien el programa comenzó con un enfoque de iniciación musical de ensamble y coro, se ha estipulado que tenga un énfasis en joropo, con el objetivo de conectar a los beneficiarios con sus raíces culturales. Es por ello que los docentes y participantes de este proyecto recibieron kits de instrumentos como arpas, cuatros y capachos.


Erica Abril, madre beneficiaria, resalta la importancia de este programa, “es una oportunidad grande que le han dado a mi hija. Es algo que los saca de tanta preocupación que ellos han tenido en esta pandemia. Un punto importante es que ella ha perdido el miedo para salir bien con las actividades de la Fundación”.
Para Ecopetrol es importante garantizar la participación de todos los niños en la ejecución del proyecto, es por ello que el programa ha tenido una formación semipresencial a través de encuentros online, contando con un programa radial y cartillas pedagógicas, debido a la pandemia, pero se planea que esta formación cambie su metodología a la forma habitual, que permita a los estudiantes estimular sus destrezas y habilidades, y generar mejores vínculos en el proceso de aprendizaje y en el trabajo en equipo.
“Como padres de familia queremos lo mejor para nuestros hijos y sé que este proyecto le va a servir no solo a corto, sino a mediano y largo plazo para su vida. He visto cambios en ella porque se ha adaptado a más responsabilidades y ha mejorado su rendimiento académico y su vínculo familiar y social”, señaló Leidy Andrea Aguilera, madre de familia beneficiaria.